El Presbiterio del territorio de Coquimbo–Copiapó, ha tenido la alegría de conducir al Bautismo al primer creyente que es fruto del Movimiento de Fe Crístico de esta Zona.
Ha sido una gran alegría haber contado con la presencia de quienes hacemos parte del Movimiento de Fe Crístico acompañando a Sergio con emoción y recogimiento. Fue un momento emotivo, la casa fue invadida por una brisa que traía perfume de rosas, la paz y quietud era un estado en el que todo quien cruzaba el umbral de la puerta de entrada hacía propio y se sumaba, inclusive los niños que en su natural inquietud y revoloteo en su inocencia se sumaron a esta atmósfera y estando en el Altar todos fuimos un solo espíritu acompañando a este hermano en su decisión trascendental: hacer de su Vida la Vida del Espíritu que lo vive bajo el fiel y leal Servicio a Cristo y al Plan de esta Dispensación.
Este Cuerpo de Presbíteros de la zona, pudimos experimentar la esencia de nuestro Sello, pues vivenciamos fuertemente el espíritu protector y de resguardo de lo Sagrado, en el momento que se preparaba y entregaba el Sacramento Bautismal que une al Hombre en pertenencia con su Dios Vivo.
Agradecemos la presencia de todas y todos, su alegría y compañerismo.